jueves, 9 de diciembre de 2010

EL SUEÑO DEL CELTA

Tras la concesión del Premio Nóbel a Mario Vargas Llosa, leí con gran interés su última novela: El sueño del celta. No disfruté tanto como pensaba. Tal vez porque la temática nos acercaba a un mundo que preferimos ignorar, el de los horrores cometidos por la colonización salvaje en dos puntos tan dispares geográficamente como el Congo y la Amazonía. Sin embargo, al final, esta parte es la que, creo, resulta más interesante, la del periplo vital de Roger Casement en su documentación del salvaje genocidio cometido en aras de la civilización de zonas inexploradas por el hombre blanco. Más tediosa es la relación de su inútil sacrificio. Asistimos al devenir final de este diplomático honesto y sensible, que le lleva a entregar su vida por la independencia de su Irlanda natal. Después de haber defendido la dignidad de las tribus congoleñas y amazónicas, no sólo no ha recibido el reconocimiento merecido, sino que su persona y su lucha han sido denigrados por unos supuestos diarios íntimos, escandalosos para la época y hasta muy tarde, ni en la Irlanda independiente se ha querido reivindicar su figura.
Ya era hora que alguien, y mejor si es de la talla de Mario Vargas Llosa, se ocupara de reparar esta injusticia.

jueves, 2 de diciembre de 2010

ANA MARÍA MATUTE

Ya se ha adelantado el blog general en celebrar el merecidísimo galardón del Premio Cervantes a Ana María Matute. Pero nosotros en esta dinámica, tan saludable, de reflejar los premios a nuestros escritores, queremos sumarnos a lo allí indicado. Y sí, efectivamente, la expresión unánime es "¡Ya era hora!"
Qué gusto poder decir que se trata de un premio absolutamente justo porque Ana María Matute pertenece a la generación de esos pocos escritores que, en el desierto de la posguerra española, nos aliviaron la sed en su oasis. Aunque, conociéndola, casi la imagen que más le va es la de un bosque, un bosque lleno de fantasía y relatos que nos devuelven a nuestra infancia.
¡Enhorabuena y que nos dure muchos años!